jueves, 2 de febrero de 2012

Bitácora

Día 46 Año 0 - Ciudad Creciente- 

Ella se acurrucó en sus brazos mientras él continuaba con la mirada perdida en la nada...
--- ¿en qué piensas?--- preguntó ella...
--- en ti --- contestó
--- no es cierto --- retrucó la joven
--- si es cierto, no principalmente en ti, también esta nuestro pequeño, todo lo que pienso siempre está incluida tu existencia y la de él, los siento parte mía.
Ella lo abrazó más fuerte y lo beso en el pecho. Ya debían irse, muy despacio y acompañados de caricias se fueron desenredando.
 Se vistieron y volvieron a sentarse en la cama.
Se miraron sin poder despegar la mirada y luego se abrazaron, el amor y la pasión era tal que lograban iluminar la humilde habitación...
Un temblor comenzó a interferir en su pequeño paraíso, las paredes rugían dolor desmoronándose poco a poco.
Corrieron hacia el sótano donde el pequeño de solo un mes se encontraba a salvo.
Todo fue cayendo de apoco y la casa fue sepultada por los escombros.
 
Un tiempo después, cuando la guerra había llegado a su fin y la reconstrucción había comenzado, encontraron los cuerpos casi congelados por el invierno.
 El bebé aun respiraba, incluso sus padres que parecían estar en una especie de coma, acurrucados de forma tal de darle calor al niño.
Cuando tomaron al bebé estaba prendido del pecho de su madre, del cual se había alimentado todo ese tiempo.
En ese momento, cuando retiraron al niño, aquella pareja falleció y el pequeño comenzó a llorar.